Intrusos?

Un pie, el otro. Salgo al pasillo. Paro la oreja. Silencio. Achico los ojos. Agudizo la visión nocturna. Nada. Ruido. Pasos. Vuelvo a la pieza. Silencio. Cierro la puerta y apoyo la cabeza. Nada. Vuelvo a la cama. Frazada hasta el cuello. Silencio. Picaporte.

Cuando se despertó (Continuación)

Que pasó antes?

Gira el cielo raso al tiempo que ella abre paulatinamente los ojos. Una voz conocida la tranquiliza pero no logra volverla completamente lúcida. En cuanto logra reconocerla y familiarizarla, una fuerte puntada en la sien le provoca volver a la oscuridad y por un instante eterno puede divisar un rostro masculino, antes de volver a perder la conciencia.

Sus ojos se abren y una extraña le sostiene la mano, llorando emocionada. Ella pestañea y la mira asustada. Otra puntada le trae la imagen del mismo hombre. Entre la nebulosa que invade su mente, se opaca en la figura del camino, un cigarrillo y el tablero de un auto. Siente un pinchazo en el brazo. Está respirando artificialmente.

Las luces se suceden y no puede oír más que el retumbar de voces impetuosas deformadas y tan solo en un plano lejano. La misma señora le toma la mano mientras ella la mira con dudas. No puede reconocerla. Un nuevo dolor de cabeza y la imagen del hombre se une con todas las otras, al tiempo que ella sentía un golpe y volar por el parabrisas del auto. Abrió los ojos y no pudo reconocer a la mujer que maternalmente le sostenía la mano. Se desmayó.

Lo que pasa...

Lo que pasa es que yo quiero un día mirarte y decirte muchas idioteces de las que digo yo, que me mires y me digas “Si Joha, todo muy lógico y muy matemático, pero la verdad es que esto que me estas diciendo no es mas que una idiotez”, y nos parezca divertido y nos riamos hasta que nos duela la panza. No quiero situaciones de libro novelesco y románticamente irreal. Quiero realidad. Creo que eso quiero.
Lo que pasa es que yo quiero un día que me mires y me digas muchas cosas y escucharte hablar, entenderte y eso. Entenderte. No quiero que me confieses tus temores más ocultos y poder celebrar el conocimiento que tengo de vos. Quiero tenerte. Creo que eso quiero.
Lo que en verdad pasa, es que yo quiero un día mirarnos y no decirnos nada. O decirnos todo. No quiero que hablemos sin ganas de hablar ni que silenciemos el deseo de expresar. Quiero, creo, que hagamos lo que tenemos ganas. Pero sobre todo, creo que quiero que tengamos ganas.

Solitaria Compañía

Pienso en sus manos rozando las mías, recorriendo mis brazos, desde las yemas de los dedos suavemente, con el dorso de la mano, hasta mi cuello. Siento sus manos firmes sosteniendo mi cara y sus besos sedosos acariciarme los labios. Recuerdo su peso sobre mi y su respiración refrescando mi oído, mis manos descubriendo la elasticidad de su piel y la imagen nítida de su mirada en mis ojos.

Te duchas (a la noche)?

Giras el grifo. Sientes el calor del agua empapar tu cuerpo y llevarse la acumulada carga enérgica del día, liberándote por completo. La artificial lluvia tibia se enreda con tu pelo y cae sigilosamente a lo largo de tu espalda provocándote un dulce escalofrío que te recorre desde el comienzo de la columna vertebral hasta los pies dejándote totalmente fuera de servicio. Tomas el shampoo, generas la prudente espuma en tu cabeza y sintiendo el vibrar de tus manos, dejas que la ducha la expanda por tu cuerpo. Cuidadosamente te enjabonas y con largos movimientos te enjuagas explorando la suavidad de tus manos. Flexionas el cuello hacia atrás para que el agua casi ahogue por un instante tu respiración y arqueas la espalda para sentir el suave golpeteo en el pecho. Vas disminuyendo lentamente el calor, hasta que el frío te copa por completo y cortas el flujo acuático. Envuelves tu cuerpo en un suave toallón, abres la puerta dejando que el aire comience a secarte y sientes la corriente suave enfriar tu rostro.

Ecuaciones personales

Calculemos:
1 + 1 = 2
Es que no es cuestión de culpas y culpables. Ni de responsables siquiera. Se trata simplemente de hacer las cosas a su manera o a la mia. O a la nuestra.

Recalculemos:
A + B = C
Si A = B entonces, C = 2B, o = 2A. que vendría a ser lo mismo. Si vos+yo=nosotros, porqué demonios yo+yo, o lo que sería igual, 2 yo, no es =nosotros?

Conclusión:
1 + 1 = 2 --> FALSO
A + B = C si A=B C =2A / C= 2B --> FALSO

Update: Dedicado a Orly y Nat, porque A+B=C, no importa en que apliquemos.

Cuando se despertó

Cuando abrió los ojos, una luz intensa inundaba el ambiente. La sorprendió el día en la vereda abismal de la calle Corrientes. Aturdida, miró hacia los costados sin comprender el tumulto de gente aglomerado a su alrededor. Intentó incorporarse y una mano poderosa y firme se lo impidió, al tiempo que se elevaba por los aires y la luz se hacía fina como un hilo. Cerró los ojos y volvió a dormirse.

Despedida

El tren dejó la estación, ruidoso, soberbio. Ya era hora, pues los pasajeros tenían sus pasajes hacía demasiado tiempo. Ahora solo se ve el humo que cuelga suspendido entre el cielo y las vías. Las vías están. Oxidadas.

Empezando por el principio

Navegando un cielo derretido en estrellas dulces profesaba un secreto exquisito. Recorria cada silencio y cada grito de su voz confesaba pasiones ocultas tras un biombo acartonado y lugubre. Sus reservas intrigantes vaciaban el espacio completo y llenaban el vacio. El deseo se escurría de sus ojos cristalinos y acompañando con pasión todo su ser, quebró la invisible linea que los dividia, dejando entre ellos solo el aire mohoso de una noche invernal.
Así de simple y así de ilógico se conocieron. Entre labios borrados y lenguas escritas. Colgados de los besos en puntas de pie. Y se guardaron como foto en un diario, con la complicidad del interés insaciable. Su debilidad pudo más.