Decir diciendo...

Es que cada viaje me deja llena de palabras por decir y sin tiempo de escribirlas. Pero no se espere de mi un mar de sentimentalismos que digan las cosas que jamás dije ni diría, ni siquiera expresiones ni nuevas filosofías.
Tengo simplemente palabras, llenas, vacías, gordas, flacas, para decirte alguna vez lo que quieres escuchar, aunque fuera de mera casualidad, y siempre lo que quiero decir, aunque no fuera de tu agrado recibirlas a pesar de la cordialidad.
Ahora digo lo que digo, que es un poco lo que puedo, porque alguna vez escribí: “yo soy yo” y hoy escribo “digo lo que digo” que no es lo mismo que “yo digo lo que soy”, eso no se dice, tan solo se es. ¿Quién soy? Yo.