Cómo fue - Capítulo 2

Lo besaste profundamente, mientras el agua se iba colando entre sus cuerpos. Tomaste sus manos entrelazando tus dedos con los suyos y abriste tus ojos para verlo inmerso en la pasión de tus labios que se disolvían en el aire cargado. Lo abrazaste y recorriste con tu mano la extensión de su espalda sintiéndolo contraerse en un escalofrío intenso. Te separaste para observar atentamente la sonrisa imborrable que se había pintado en su boca y quedaste seca mirándolo, tan solo a un centímetro de su cuerpo mojado.

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